Minimed 640G es el nombre comercial del nuevos sistema integrado de Medtronic para el tratamiento de la diabetes. Un nuevo dispositivo presentado hace unos días en nuestro país que integra una bomba de insulina y un sistema de monitorización continúa de glucosa en un mismo aparato, en definitiva y como dicen desde la propia Medtronic un paso más en el camino de alcanzar el ansiado páncreas artificial.

La principal ventaja que aporta el Minimed 640G para las personas con diabetes tipo 1 es la tecnología SmartGuard, una tecnología que ofrece una protección avanzada contra las hipoglucemias. Es decir informa y predice al paciente cuando va a tener una hipoglucemia, una bajada de azúcar y automáticamente el dispositivo detiene la infusión de insulina, tal y como haría el páncreas. Una vez resuelta la hipoglucemia y con la vuelta a la normalidad de los niveles glucémicos del paciente la bomba de insulina con los datos del medidor incorporados volvería a reiniciar la infusión de insulina.

De todo ello nos habló la semana pasada el endocrino del Hospital Clínico de Valladolid, el doctor Gonzalo Díaz. A continuación os dejamos con sus testimonios al respecto del MiniMed 640g de Medtronic.

Según el doctor Díaz algunos centros hospitalarios ya han usado el Minimed 640g en algunos pacientes con resultados muy positivos y al parecer será en Septiembre cuando el Minimed 640g estará comercializado en toda España.

El gran avanza de este nuevo infuso de insulina inteligente es además la precisión de la monitorización continua de glucosa. En palabras de Diaz la fiabilidad del sistema ha mejorado mucho en comparación con sus antecesores. El decalaje entre los resultados que aporta una glucemia capilar en sangre tradicional y el Minimed 640g que mide la glucosa intersticial, es decir en la grasa, es mínimo como nos mostraron en el congreso médico. Un aspecto que consigue que la información por tanto del Minimed 640g sea más fiable para que el paciente pueda tomar decisiones más rápidas y correctas.

Para cerrar el círculo y poder estar hablando de un verdadero páncreas artificial que funcione solo y solucione muchos de los problemas de la vida de un paciente con diabetes tipo 1 hay dos cosas que le faltan y que además son las más complicadas de resolver aunque no imposibles. Por un lado poder solventar las hiperglucemia o subidas de azúcar. El sistema no está preparado para ello por la complicación de esa solución y en segundo lugar y muy relacionado con la posibilidad de cubrir con fiabilidad los picos de azúcar tras las comidas.